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La levedad – Catherine Meurisse

La levedad es el relato de una superviviente que ha visto morir a sus compañeros y ahora no sabe cómo seguir adelante. Habla de estrés postraumático, del miedo, del vacío y la pérdida de memoria. Pero también, y sobre todo, habla de la belleza.

El 7 de Enero de 2015 hubo una masacre terrible en la redacción de la revista Charlie Hebdo en París. Catherine Meurisse, una de las redactoras, llegó tarde a trabajar ese día, y por eso salvó la vida. El trauma que le provocó esa experiencia hizo que perdiera la ilusión, la capacidad de dibujar y todo lo que le importaba. Pero al final consiguió volver a llevar una vida normal.

La levedad es la historia de su recuperación, en forma de novela gráfica.

Los dibujos de La levedad son muy sencillos, pero tremendamente expresivos.

Lo que más me gusta es cómo la autora juega con los colores para expresar sentimientos diferentes. También hay que destacar el gran número de cuadros y esculturas reales que están representadas en este libro, desde El grito de Munch hasta La balsa de la Medusa de Géricault, por poner unos pocos ejemplos.

En este libro tampoco falta el humor negro, que siempre fue característico del Charlie Hebdo. Algunas viñetas son chistes acerca de la matanza y los asesinos, para las que es necesario el dibujo, no se entenderían solamente con el texto.

Esta novela gráfica se podría dividir en tres partes:

Al principio, Catherine nos cuenta lo que sucedió inmediatamente antes y después del atentado.

Nos habla de cómo era vivir con escolta policial, de las manifestaciones de apoyo, de su miedo, sus visitas al psicólogo, y su vacío. La vemos intentando recuperar la normalidad de todas las formas que se le ocurren, pero nada funciona.

La segunda parte de La levedad comienza cuando Catherine reúne valor para acercarse al lugar de las muertes.

Notamos que ha pasado bastante tiempo porque hay una guía turística informando a sus clientes.

«Nos encontramos en la calle de Charlie Hebdo. Ya saben a qué me refiero… Almas sensibles, abstenerse».

Lo mejor es la viñeta en la que los turistas se ponen a sacar fotos, dejando claro que todas esas manifestaciones de apoyo y muestras de solidaridad eran pura hipocresía. En realidad, a nadie le importa, el atentado se ha convertido en una atracción turística.

Entonces Catherine nos habla del Síndrome de Stendhal, un desmayo que cualquiera puede sufrir ante un aluvión de belleza.

Decide que eso es lo único que podrá curarla, y viaja a Italia. Esta parte de La levedad es realmente exquisita. Hay numerosas menciones a escritores, músicos, y todo tipo de artistas célebres. Hay reflexiones realmente interesantes, algunas irónicas, otras profundas. Y la autora demuestra que es una persona muy culta, que sabe de lo que habla.

La levedad termina insistiendo en el mensaje presente a lo largo de toda la obra. La belleza puede salvarnos. Pero de verdad, no en sentido figurado, no es una metáfora ni una forma de hablar. La belleza puede devolvernos la memoria, la esperanza, puede darnos una razón para querer seguir viviendo. El arte es algo sumamente importante, aunque por desgracia hay muchas personas que no aprecian su valor.

Toda la historia está llena de homenajes a los compañeros fallecidos.

Pero no son discursos solemnes, sino recuerdos cariñosos de cosas cotidianas que la autora compartía con ellos. Rememora las reuniones de redacción, el poema que le gustaba recitar a un compañero, o cómo otro de sus colegas le animaba a cabrearse porque así dibujaba mejor. Hay escenas en las que Catherine se imagina conversaciones con ellos, y no puede evitar reírse al pensar en lo que le dirían. Son momentos agridulces, pero llenos de sensibilidad.

La levedad me ha sorprendido, dándome mucho más de lo que esperaba. Creía que iba a ser una historia triste y dura, pero en vez de eso me he encontrado con un relato lleno de humor y esperanza. Sinceramente, me cuesta encontrar algo negativo que decir de esta novela gráfica. Para mí es perfecta.

¿Qué opináis vosotros? A los que la habéis leído, ¿os gustó tanto como a mí? A los que no, ¿os apetece darle una oportunidad? Espero vuestros comentarios.

Por hoy me despido hasta la próxima entrada. Hasta entonces, disfrutad de la lectura. Un saludo a todos.

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2 comentarios

  1. Flecha-literaria Flecha-literaria

    Gracias por leerme, me hace mucha ilusión recibir tus comentarios. Anímate a descubrir la novela gráfica, hay cosas muy interesantes. Un beso.

  2. Patricia Sánchez Hernández Patricia Sánchez Hernández

    Me ha encantado tu reseña, normalmente la novela gráfica no está en mi lectura habitual, pero parece que ésta es lectura obligatoria. ¡Gracias!

Los comentarios están cerrados.